La excitación de Asteria

Hablábamos de fetiches, de los suyos y los míos.


Asteria {mi señor}: mi fetiche en cuanto a ropa son los uniformes, y en ti. Si no es en ti, me gustan los uniformes pero no como fetiche.

Se completó la transferencia de «Test de sumisión.doc».

Maestro Látigo: en amarillo lo que más me excita. Marca tú en otro color

Asteria {mi señor}: me gusta lo público, no lo que se ve, sino lo que tú y yo sabemos y los demás no: sí, los susurros, las miradas, y lo sexual al girar la esquina o al otro lado de la puerta, las caricias debajo de la mesa

Maestro Látigo: entre tus preferencias pones en color cosas que contestas que sólo las haces si te lo ordeno

Asteria {mi señor}: sí, me gustan, pero si me lo ordenas. Lamer tus testículos me gusta que me lo ordenes y tener yo la iniciativa. No es ley universal, puede que un día me apetezca más una cosa, o algo que normalmente diría que no, me entre la curiosidad… Las cosas cambian, mi culo era sagrado hasta que lo dejé a tu disposición ^^

Maestro Látigo:   y cómo me gustó penetrarlo

Asteria {mi señor}: te lo tengo dicho, no es que seas especial, es que eres único. El otro día te lo dejé escrito, te quiero casi desde que te vi. No es que hace mucho tiempo desde que siento… no, es que es (eres) único, no ahora, sino antes también. Plano afectivo y sexual. Sí tengo nombre, soy tu HE, solo que es muy largo, y si no tengo, es cosa tuya elegirlo. Por ejemplo: yo no me voy a poner una venda o un collar porque me apetezca someterme, tú has de ser quien me lo ordene o quien me lo ponga, mi dueño. Tú decides, me gusta que me digas bicho, niña, puta, me gusta que me digas cualquier cosa

Maestro Látigo:   recuerda traer el mando y la bola

Asteria {mi señor}: sumix

Maestro Látigo:   ¿o prefieres no ir al cine? ¿dar una vuelta?

Asteria {mi señor}: me apetece verte. Tocarte y cogerte de donde pueda 😛 Me gusta pasear, me gusta el cine, y me gusta encerrarme contigo y darte placer. Y lo que sea. Si vamos al cine, no nos vamos a enterar de la película. Pero me gusta ir al cine y meternos mano. Estoy más salida que el pico de una mesa y te haría de todo menos bailarte jotas, así que también me apetece encerrarnos y darte placer. Pasear me gusta, pero si tenemos tiempo para otras cosas, prefiero otras cosas. 

Maestro Látigo:   vendas, cuerda, tijera y el mando con la bola; no traigas más peso en tu espalda. A las 17.15 h. en Dublín para encerrarnos

La imagen tiene un atributo ALT vacío; su nombre de archivo es sumix.jpg

Asteria {mi señor}: sumix

Asteria {mi señor}: no hace justicia a lo que en realidad ocurrió, pero esta tarde disfrutaba recordándolo y me apetecía compartirlo

Maestro Látigo: por cierto, nos iremos directos desde la redacción

Asteria {mi señor}: okok ¡cómo te deseo! no pasees delante de mí, que me dan ganas de arrojarme sobre ti :$ Reconozco que hoy prefiero quedarme para mirarte que ir al club. Tío bueno

Has aceptado la invitación para iniciar la recepción de imágenes de la cámara web.

La imagen tiene un atributo ALT vacío; su nombre de archivo es sumix.jpg

Asteria {mi señor}: preferiría estar haciendo otras cosa en la cama ^^ me he acostado ya para no dormir en el sofá, para no olvidar la sesión de hoy. Sé cómo me dormiría ahora: con las caricias que me has hecho esta tarde en la cabeza y en la espalda. Después te haría una mamada para que te relajaras del todo ^^^^ y finalmente te dormirías mientras te hago caricias en los muslos. Estoy despejadísima y salidísima. Jo, seguro que a tu culo le sienta genial el chándal. Pregunta que me está costando hacerte: lo que comentamos ayer por encima de salir en semana, ¿fue un «podría haber sido» o un «puede ser»? Yo aún puedo, pero dejaré de poder en breve, porque tengo a todo el mundo pendiente de lo que yo decida. Llevo esperando este momento un montón y ahora que te tengo delante me he puesto tan nerviosa que se me ha hecho un nudo en el pecho y no sé qué decir. Patético ¿eh? No pienso hacer afirmaciones sexuales hasta una comprobación más. Te prohíbo que estés guapo cuando no estás a mi lado ¬¬ Así me gusta enseñándome ese culo que me pone tanto. No me gusta dormir en cama sin ti. (sumix) tío bueno

Maestro Látigo:   cordera apetecible a mis ojos y a mi carne, si no te fuera a ver esta tarde me masturbaba ahora mismo

Asteria {mi señor}: no, no lo hagas, lo hago yo si quieres, déjame a mí ^^^^

Maestro Látigo:   no haces más que pedir

Asteria {mi señor}: lo sé, sé condescendiente, por favor (pidiendo otra vez)

Maestro Látigo:   bueno pero que no sea la última vez

Asteria {mi señor}: teniéndome a mí no sé para qué fuerzas, solo tienes que empujar mi cabeza hacia abajo y sinceramente, creo que te iba a gustar más, sumix . Espérame en la cama. Me encanta cuidarte. Además, también estoy para eso. (L) sumix  Me has dejado noqueada, patidifusa, con lo que me has dicho a la vuelta. Me costaba mucho hablar, estaba emocionadísima. Gracias. Pero el calentón no se me quita. ^^ Es más. Propongo que cuanto antes mejor nos veamos con cuatro paredes, techo y nadie más. Hasta te diré las palabras :$) Muá sexo sexo sexo… digoooo… Hola :$ sumix Y por si las moscas, reitero mi ofrecimiento… ¡¡cinco minutos!! 

Maestro Látigo: como que te cuesta mucho calentarme

Asteria {mi señor}: pero tiene efecto secundario: me descontrolo yo también. Las vacaciones del año pasado fueron idílicas, fantásticas, yo aún no me creía que lo que estaba pasando estuviera ocurriendo de verdad pero ahora lo disfruto más. Disfruto más del tiempo que pasamos juntos. Que me siento más a gusto en la cama y fuera de ella, y disfruto más. Que estos sí son días de vino y rosas. Me gustas más cuanto más te conozco, acabo de pegarte la explicación

Maestro Látigo: sí, eso, me la cascas

Asteria {mi señor}: ¿cuándo?

Maestro Látigo:   entiendo que demore tus deseos que te masturbe pero a mí me gusta

Asteria {mi señor}: ya pero no puedes apropiarte así de mi privilegio, es mi turno. Estoy pensando… hum, ¿aceptarías cinco minutos cuando tengas un apretón si a cambio en otra ocasión me das cinco minutos tú a mí? trae p’acá ese pecho hermoso. Vale, aunque tengamos que dejar pasar cierto tiempo por las apariencias, tenemos que escaparnos un día o dos antes de verano. ¿sí? y a la próxima sesión de cine que tengamos, serás tú quien se ponga el abrigo por encima 😛 Tengo apuntado en la lista de cosas por hacer algo que podríamos haber hecho ya y que no he hecho porque pensaba que no te gustaría nada, y resulta que fue cosa tuya: atarte yo . Si consigo librarme un ratito de la sensación de que tú eres quien me domina, lo haré. Pero está muy arraigada, tenlo en cuenta

Maestro Látigo:   pues lo demuestras obedeciéndome

Asteria {mi señor}: Sí claro, pero me resulta extraño, atarte a ti (vergu) a ti no… a TI. Ordénamelo. Vale, ya estamos, tengo que meter la cabeza bajo el grifo (ufffff). Otra cosa que no te he dicho antes, que cuando me excito o me emociono mucho me cuesta hablar, y se me ha pasado. Me he acordado hoy porque estaba tan… TAN excitada en el bar del polígono que me ha venido a la mente: ¿y si me pillo una moña para que se me pase? No iba a hacerlo pero estaba desesperada (vergu) No me podía estar quieta con las piernas por eso. Ayyyy qué pena, no poder ofrecerte mi cuerpo de almohada ahora. Como anoche, que soñé contigo y ahora no me acuerdo de qué, hale, hasta que no me acuerde daré vueltas sin parar: que había comprado bragas de algún color, que no eran blancas o negras, y estaba desesperada porque no encontraba sostenes de mi talla y que ejercieran de «grúa» como los que acostumbro a llevar, y pensaba: ahora no me las puedo poner porque quiere que vaya conjuntada de color

Maestro Látigo:   te lo pienso quitar, me gusta magrear tu pecho opulento.

Asteria {mi señor}: pues qué complicación, porque no sé qué más puedes darme. Me ayudas con las cosas que me propongo, me enseñas, me das tu tiempo, me prestas tus libros, me invitas a comer casi siempre, si no me emperrara de vez en cuando sería siempre, y me vuelves loca en la cama… 

Maestro Látigo:   nada realmente valioso se puede comprar. Es evidente que quieres irte de viaje sola conmigo para llevarme a la cama

Asteria {mi señor}: ya empiezas a meterte conmigo. No te metas conmigo, ¡métete en mí! ahora me gustaría que jugaras con la navaja y mi piel y con el hielo pero la navaja primero y notar el filo. Me encantas

Maestro Látigo:   ¿por tocar la flauta?

Asteria {mi señor}: no, eso es cosa mía  lo de tocar tu flauta

Asteria {mi señor}: prefiero lo que tú prefieras, bueno, prefiero lo que me dé más tiempo, pero vamos, el caso es que me conformo con lo que me des. Sumix. Ríes ante el dolor, me gusta. Yo quiero el calorcito de tu cuerpo el otro día que te quedaste dormido. (vergu) No puedo parar de reír, me he acordado de lo de te ataré al lecho ¿al techo por qué? al lecho! ¿Me odias? no, ¿entonces por qué me vas a atar al techo? ¡al lecho! etc. Boca abajo, pero sí, átame al techo

Maestro Látigo:   provocadora, me gusta verte desnuda por la webcam

La imagen tiene un atributo ALT vacío; su nombre de archivo es sumix.jpg

Asteria {mi señor}: en vez de decirme: sí, vístete, no te constipes por mí, vas y conectas la cámara, sumix slurp, ñam, tío bueno, cuerpazo, mi macho, groar. (Sí, ando otra vez con fuego en el cuerpo, tenías razón ayer, es adictivo)

Maestro Látigo:   me venían obscenidades a la boca cuando me la comías…

Asteria {mi señor}: a mí obscenidades no, bueno sí, pero más que obscenidades eran barbaridades. Jo, es que eso es demasiada tentación, ahora, te quejarás. Quería recibir, bueno, tenía ganas de recibir pero como tengo dos dedos de frente pensé: hasta que reciba y me corte el rollo, mejor me callo: cuando me asfixiaste quería más, cuando me diste en el culo, quería más y por más partes. Cuando me pellizcabas quería más y más fuerte. mordiscos en los brazos y en la espalda. Más tortas en la cara. Y asfixiarme más, y más, y un forcejeo real. Jo, me da vergüenza. Tengo hasta palpitaciones cuando lo pienso, te digo que ando con el cuerpo muy caliente, la idea es pedir más. Mi señor, ay… me estoy poniendo mala otra vez

Maestro Látigo:   sin embargo noté que te gustaba que te hablara mientras me la chupabas

Asteria {mi señor}: sí, bueno, me pone mucho que me hables en cualquier momento del sexo, aunque a veces no entienda. Me pone mucho que me hables y que me cojas la cabeza, y que me guíes, que me empujes, ayer (y por lo que estoy comprobando, hoy) me ponía la brusquedad, y los movimientos violentos: hoy no puedo parar de pensar en eso, estoy obsesionada. Madre mía, además no tengo ganas de someterme ni de hacerte sumix, sino de que me obligues a que lo haga, que me fuerces a ser tu esclava, uf pero sigo salida, siempre querré sexo.

Maestro Látigo:   y llevarte la cabeza a donde me plazca y follarte de una manera y de otra. Haz el rito

Asteria {mi señor}: lo he hecho pero al poco he de incorporarme, me pongo malísima. porque sigo muy caliente. Me encantaría ir a verte, comprende mi deseo por ti. El hielo me iba a hacer polvo pero imaginarlo me pone aún más. ¿Podrías ponerme a prueba a ver cuánto puedo aguantar sin gritar? humm… estírame del pelo. Más salida que el palo de una escoba, que el pico de una mesa, que el mango de un cazo, arg. Además ya te he dicho que estoy muuuuuy… :$ excitada. Lástima de ahora inaccesible, snif.

Maestro Látigo: me gusta aporrearte la cara con el pene

Asteria {mi señor}: (brinco) me enciendes con una sola frase. Bueno, me subes la temperatura, encendida ya estaba pero prométeme que esta semana repetiremos con más calma (y con más cuerdas) bueno, no me prometas, pero dime que lo intentaremos. Qué ganas tengo de perderme contigo unos días. Estoy ansiosa por que me vuelvas a tocar como hoy (como cualquier otro día que me has tocado también, pero tengo antojo de como hoy), solo que más. A partir de mañana después de cumplir con mi deber de periodista, puedes echarlo de menos poseyéndome

Maestro Látigo:  entro a desearte y buenas noches

Asteria {mi señor}: las buenas noches no, deséame a secas

Más de la Holandesa Errante

Escritos de la Holandesa Errante

HE {Junger} Junger cuando estaba boca arriba y me follabas de rodillas, yo estaba excitada y encima era muy feliz. Me pones a cien cuando me tocas, me haces perder el control, los papeles y el sentido cuando me pones boca abajo, cuando me usas, cuando te la chupo. Pero cuando puedo mirarte a los…

La prueba de la Holandesa

Holandesa Errante {Junger}  Junger  puedes vendarme y hacerme lo que quieras. Puedes vendarme, atarme, amordazarme, o lo que más te plazca. Con venda o sin ella, con mordaza o sin ella, con látigo o sin él  y la primera vez que me diste una bofetada en la cara… qué impresión, imborrable. El finde te invito…

Recuerdos de la holandesa

Junger a  HE {Junger}: comencé a poseerte medio desnuda, ardía de pasión, y para acabar de sacarte los pantalones, que tenías en los tobillos, me encontré unas zapatillas  y volqué todo en delicadeza para esos pies HE {Junger}:  un viernes de cierre. Zapatillas de lona, desatadas, despacito, muy despacito. Yo recuerdo una tarde post examen,…

Deja una respuesta

Introduce tus datos o haz clic en un icono para iniciar sesión:

Logo de WordPress.com

Estás comentando usando tu cuenta de WordPress.com. Salir /  Cambiar )

Imagen de Twitter

Estás comentando usando tu cuenta de Twitter. Salir /  Cambiar )

Foto de Facebook

Estás comentando usando tu cuenta de Facebook. Salir /  Cambiar )

Conectando a %s